El Pedido de permiso para dar Reiki
Ante el deseo de realizar un tratamiento de Reiki a otra persona, ya sea con ella presente o a distancia, es necesario e imprescindible, primero contar con su total aprobación. Esto se debe a que si igualmente le realizáramos el tratamiento sin su voluntad, nos estaríamos metiendo en un campo que como Terapeutas de Reiki no nos corresponde ya que estaríamos invadiendo la privacidad de esa persona y por consiguiente ingresando a un lugar al que no nos han llamado. Seríamos una especie de invasores y correríamos los riesgos que estos tienen cuando invaden algo. En este caso tomaríamos parte en un proceso de energetización de esa persona y en la consiguiente mejoría en su estado general cuando, en realidad, no sabemos si la persona quiere mejorar y estar bien, o si ella ya ha aprendido todo lo que tenía que aprender durante el proceso su enfermedad. Por lo tanto, no la estaríamos ayudando como se debe. A partir de tener en claro el concepto de que sólo podemos utilizar la Energía Reiki en el caso en que nos autoricen, existen una serie de alternativas que podemos aplicar en el supuesto que no podamos establecer un contacto físico con el futuro receptor del tratamiento de Reiki y preguntarle si quiere recibir una dosis de Energía Vital Universal. Para ello, debemos ponernos en una actitud meditativa y luego de habernos relajado, realizar un simple ejercicio de visualización creativa, imaginando que estamos sentados frente a la persona a la que queremos aplicarle Reiki, saludarla y le preguntarle si quiere recibir un Tratamiento de Reiki. Nos tomamos unos instantes y escuchamos su respuesta. La mayoría de las veces, la respuesta será positiva. En el caso que la respuesta sea negativa, es imperativo que no le realicemos el Tratamiento de Reiki a esa persona ya que nos lo ha prohibido el que para nosotros estaba interesado y estaríamos, de esa forma, violando la Ley Universal de la Privacidad cuya consecuencia caería directamente sobre nuestro propio ser. Si la respuesta es afirmativa podemos suministrar el Tratamiento de Reiki pero agregando al Pedido de Permiso para Ser Canales de Reiki que siempre aconsejamos realizar, alguno de los siguientes conceptos referidos a la remota posibilidad de habernos equivocado durante el ejercicio de visualización realizado anteriormente. Estos conceptos tienen en cuenta lo siguiente:
1) Agregar a nuestro Pedido de Permiso para Ser Canales de Reiki el hecho de que en el caso en que la persona visualizada no quiera recibir la energía Reiki proveniente de este tratamiento, dicha Energía se dirija en forma directa a nuestro Planeta Tierra.
2) Agregar a nuestro Pedido de Permiso para Ser Canales de
Reiki el hecho de que en el caso en que la persona visualizada no
quiera recibir la energía Reiki proveniente de este tratamiento,
dicha Energía quede latente en el Espacio hasta el día en que
persona visualizada realmente quiera por si misma, recibir la
energía Reiki de este tratamiento.
En ambos casos quedaremos cubiertos de no invadir la privacidad
de nadie y de cumplir en forma correcta nuestra función de
Operadores de Reiki, teniendo en cuenta el hecho de que siempre
que podamos es mejor preguntarle directamente a quien recibirá
Reiki si realmente lo desea. Con preguntárselo una vez bastará
para toda la vida y no hará falta que hagamos el ejercicio de
visualización, pero la efectividad del Tratamiento será tan
positiva como deba ser en uno u otro caso y nos permitirá vibrar
con la alegría que nos da ser Terapeutas Reiki y cumplir con la
misión de ser canales de la Energía Vital Universal que llena
nuestros corazones de paz y de amor.